Promover la salud y bienestar de los trabajadores es un compromiso de todos. Cada vez más expertos, responsables del talento humano o de salud corporativa, ya entienden que es un tema clave, y que redunda de forma positiva en la empresa.
Incentivar a los trabajadores a tener estilos de vida saludables aporta de inicio dos ventajas inmediatas:
- Traslada a los trabajadores que su empresa se preocupa por ellos, que los consideran un recurso valioso y que por como tales, se preocupa de su bienestar.
- Los hábitos de vida saludables ayudan a reducir las bajas laborales producidas por enfermedades (comunes y laborales).
Pero para ello hace falta abordar la salud desde un enfoque integral, fomentando el cuidado por dentro y por fuera, es decir, tanto mental como físico.